Hola, queridos amigos. Al parecer llega la Navidad, y eso para mí significa PROBLEMAS.
El otro día estaba paseando cuando me pareció ver nata en la acera. Me puse contenta, porque debo confesar que soy muy golosa. Tuve la suerte de que mi dueña girara la cabeza en el momento en el que metí el morro en la "nata". Me di cuenta de que no olía tan bien como esperaba. El caso es que, como me riñen cuando como cosas de la calle, me limpié con la lengua para evitar la bronca y... ¡estaba asqueroso! La nata no era nata, era spray de nieve. GRRR. Vaya decepción y qué asco, tuve un sabor amargo en la boca durante el resto de tarde y por supuesto mi dueña me regañó y se rió de mí.
Desde aquí pido la prohibición de esos malditos engaña-golosos.
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| No a la nata falsa |
Mientras se cumplen mis reivindicaciones...
¡Cuidado con meter el morro donde no hay nata!
Jajajajjajajajjajaja. Por golitrona!!
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