Fijaos en lo que he encontrado por internet... Un perro que abandona a su familia... ¡Qué valiente! ¡Ójala fuera amigo mío!, lo mismo me hubiera dado un paseo con él, parece que conduce bien...
No me extraña que lo hiciera; yo, a veces, también necesito vacaciones sin familia, pero nunca llegan. Me regañan porque me como la comida abandonada por ellas en la mesa de la cocina, me regañan si voy a limpiar sus calcetines y se me escapa el diente y se rompen, me regañan si ladro y luego me hacen cantar, me regañan si me estoy haciendo pis y lo hago en la alfombra para que no se vea (lo hago para que no lo tengan que limpiar), me regañan si en el parque salto las vallas para entrenar (no he dejado el "parkour"),me regañan si me voy un poco lejos y en casa me echan de su lado si me pongo demasiado cerca (en sus brazos), me regañan si me baño en los charcos y ellas me meten en su bañera (para qué quiero dos baños? además el de barro sale gratis y tiene sus beneficios, para verlo pulsa aquí)...
Vamos, que no hay quien las entienda y que yo voy a ver si aprendo a conducir. No las abandonaré para siempre, pero un par de semanas sin mí seguro que sobreviven.
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